La autonomía del Banco de México como medio de dominación

Mayo 2019

Los ideólogos del sistema económico y político actual nos han hecho creer que esta sociedad se rige por la forma más elevada de democracia, de representación popular, que en los hechos se reduce a acudir a votar cada cierto tiempo por candidatos que se eligen dentro de la élite de los partidos políticos tradicionales. Las decisiones más trascendentales, cuyas consecuencias tienen que ver con el presente y el futuro de muchos mexicanos, son tomadas en las más altas esferas del poder político, que se conforman por un puñado de propietarios de grandes fortunas, a cuyo servicio utilizan las instituciones de poder para cuidar e impulsar sus intereses. 

A pesar de ello, para que la gente no se inconforme y proteste, e incluso para que se convenza y acepte voluntariamente ser excluida del poder político, la clase política dominante necesita de la propaganda mediática y manipulación ideológica para deformar la percepción del público a favor de su causa.

Una de las formas más sutiles de manipulación es hacer pasar por preceptos científicos afirmaciones que no lo son. Es aquí en donde la ciencia se pone al servicio de las clases dominantes. Así sucede con la teoría económica que fundamenta al neoliberalismo, y a todo el conjunto de medidas económicas y políticas que se toman con base en sus planteamientos. 

Este es el caso de la idea de que el Banco Central debe ser autónomo y tener como objetivo único y principal el control de la inflación. Los economistas partidarios de la independencia del Banco Central se han esforzado por darle un fundamento científico, haciéndola pasar por una cuestión meramente técnica, que escapa al deseo de algún individuo o grupo social, como sucede con la ley de la gravedad o las leyes que rigen el movimiento de los cuerpos.

“El verdadero propósito del Banco Central es brindar estabilidad a los grandes capitales internacionales”

Que el Banco Central sea autónomo implica que ninguna autoridad puede exigirle la concesión de algún crédito, y que ésta institución tiene el control absoluto sobre la cantidad de dinero que circula. ¿Quién en concreto está impedido de exigirle algún préstamo al Banco Central? El gobierno. El argumento es el siguiente: el gobierno tiende a gastar más de lo que recauda, incurriendo sistemáticamente en un déficit. Si el gobierno se encargara del Banco Central, optaría por saldar su déficit emitiendo el dinero que necesita, lo cual a su vez conduciría a un incremento de los precios debido al exceso del circulante. Por tanto, el gobierno no es de confianza para manejar responsablemente el dinero.

Actualmente, casi una treintena de países desarrollados y en desarrollo (los más), incluido nuestro país, han adoptado este enfoque. En México, hemos dejado atrás los objetivos de la industrialización para perseguir el control de la inflación, subordinando a este único mandato la acción del gobierno y de la política económica en general. Ante la imperiosa necesidad de empleo, de infraestructura educativa a todos los niveles, de hospitales, áreas recreativas y de práctica deportiva, de teatros y foros culturales, de mejores salarios, etc., el gobierno debe acatar las directrices del Banco de México y abstenerse de incrementar su gasto público con fines proselitistas que terminan perjudicando a “todos”.

El control de la inflación se justifica diciendo que es la “mejor contribución que el banco central puede hacer a los objetivos supremos de mayor crecimiento, mejor distribución del ingreso y mayor bienestar para la población”, en palabras del ex-gobernador del Banco de México Agustín Carstens. No obstante, el verdadero propósito es brindar cierta estabilidad y certidumbre al cada vez más complejo sistema financiero y a los grandes proyectos de inversión de los capitales internacionales, sacrificando con ello la implementación de políticas económicas que conlleven a la mejoría del bienestar económico de la población.

Tania Rojas es economista por la UNAM e investigadora del Centro Mexicano de Estudios Económicos y Sociales.
tnia.rjas@gmail.com

Deja un comentario

Scroll al inicio